World Vision impulsa programas de desarrollo comunitario

En World Vision Perú tenemos un compromiso con el desarrollo sostenible y el bienestar de las comunidades. A través de alianzas estratégicas con actores locales e internacionales, hemos implementado soluciones que contribuyen al fortalecimiento de capacidades y la protección de derechos fundamentales, impulsando un desarrollo integral y sostenible. Te invitamos a conocer algunas de las acciones más impactantes del 2024 en beneficio de la niñez más vulnerable.

Antenas satelitales mejoran conectividad en comunidades rurales, campesinas e indígenas de la Amazonía

En Loreto, cuatro comunidades han sido beneficiadas con la instalación de antenas satelitales con acceso a internet. En colaboración con la Gerencia Regional del Ambiente y la Gerencia Regional de Educación de Loreto, la iniciativa responde a la urgente necesidad de reducir la brecha digital en áreas remotas, mejorando tanto la conectividad educativa como el monitoreo ambiental en las áreas de conservación regional. Las antenas cuentan con sistemas energéticos autónomos, como paneles solares, lo que garantiza su operatividad en lugares sin acceso a electricidad, y se espera que su implementación fortalezca las capacidades de las instituciones educativas y comunidades en su conjunto.

El impacto de estas acciones es significativo, ya que permite a las comunidades beneficiarias mejorar sus oportunidades educativas y optimizar la vigilancia ambiental. Las instituciones educativas ahora cuentan con internet para fortalecer los procesos de aprendizaje, mientras que las actividades comunales se han reorganizado para aprovechar este recurso de manera eficiente.

Especialistas de centros de salud mental son capacitados para proteger a la niñez

En 2024, capacitamos y certificamos a 96 profesionales de 48 centros de salud mental en Cusco, Ancash, La Libertad, Ayacucho y Huancavelica en la metodología «Bálsamo de Ternura». Esta certificación garantiza que los especialistas puedan abordar de manera integral las problemáticas socioemocionales de familias, niños, niñas y adolescentes, brindándoles herramientas restaurativas que fomentan un entorno más seguro y afectuoso para el desarrollo comunitario. La metodología está diseñada para promover la salud mental en los entornos más vulnerables, lo que beneficia tanto a los individuos como a sus comunidades.

Además, a mediados del 2024, representantes de las Direcciones y Gerencias Regionales de Salud de Cusco, Huancavelica, La Libertad y Lima, junto con World Vision Perú, y Latinoamérica y el Caribe, firmaron un importante pronunciamiento para fortalecer los servicios de salud mental comunitaria, especialmente para niñas, niños y adolescentes, en respuesta a la alarmante situación socioemocional agravada por la pandemia de la Covid-19. La implementación de «Bálsamo de Ternura» ha permitido fortalecer el sistema de salud mental en estas regiones, integrando a instituciones clave como la Dirección Regional de Salud y las Instituciones Educativas, con miras a convertirse en política pública.

Renovamos viviendas para proteger a familias de dengue y malaria en la Amazonía de Perú

En el marco del proyecto “Reducción de las enfermedades infecciosas tropicales y promoción de la salud básica en la Amazonía, Perú”, en alianza con la Agencia de Cooperación Internacional Coreana (KOICA), se ha implementado el acondicionamiento de 92 viviendas con mallas mosquiteras en la comunidad de Llanchama, Loreto, parte de la Amazonía del Perú. Este esfuerzo, que incluye medidas complementarias de salubridad y manejo adecuado del almacenamiento de agua, tiene como objetivo reducir la proliferación de mosquitos transmisores de enfermedades como el dengue y la malaria. Los resultados preliminares de la investigación, realizada por World Vision y la Gerencia Regional de Salud de Loreto, muestran una reducción significativa del 80% en la presencia de mosquitos dentro de las viviendas.

Esta iniciativa beneficia directamente a familias vulnerables, priorizando a niños y niñas. Además de mejorar la salud pública, este trabajo refuerza la concientización comunitaria sobre la importancia de la prevención, brindando soluciones sostenibles que impactan positivamente en la calidad de vida de las familias.

Proyecto psicoeducativo fortalece la salud mental de la niñez en Puno

En asocio con la Universidad Adventista de Puno, más de 350 madres y padres, y 500 niñas, niños y adolescentes de escuelas públicas del distrito de Juliaca participaron en un proyecto para la promoción de la salud mental mediante herramientas de prevención. Este esfuerzo cobra especial relevancia en Puno, una región con altos niveles de pobreza rural y deficiencias en servicios básicos, donde cuatro de cada diez habitantes enfrentan condiciones de alta vulnerabilidad.

Entre las estrategias utilizadas, se destacan “Bálsamo de Ternura”, un modelo de restauración emocional para adultos dirigido a docentes y padres de familia, y “Hilos de Nuestra Vida”, enfocado en niñas, niños y adolescentes. El proyecto intervino en centros educativos públicos identificados como vulnerables según indicadores del Ministerio de Educación. La participación activa de docentes, padres y estudiantes en este tipo de programas refuerza el compromiso con un enfoque comunitario que responde a las crecientes necesidades de salud mental en la región.

Huaral: una década de transformación y esperanza para la niñez

Huaral, provincia de Lima cuya economía depende en gran medida de la agricultura, ha sido el escenario de una transformación que, durante diez años, ha mejorado significativamente la vida más de 17 mil personas, entre ellas, niñas y niños. En esta región, la anemia infantil alcanzaba un alarmante 48%, mientras que la comprensión lectora se encontraba en apenas un 18%. Gracias al trabajo colaborativo entre la Primera Iglesia Bautista de Glenarden y World Vision, hay un panorama diferente.

Hoy la anemia infantil ha disminuido significativamente a un 32%, mientras que la comprensión lectora de los niños ha mejorado a un 34%. El impacto, además, incluyó mejoras en infraestructura, como la optimización de un pozo tubular que ha facilitado el acceso al agua para más de 5,800 personas. El proyecto también ha dejado un legado de liderazgo comunitario, formando a más de 200 líderes y pastores en prevención de abuso sexual y crianza positiva, y empoderando a adolescentes para que sean agentes de cambio no solo en su localidad, sino en el país.