14 Nov, 2024
18 Sep, 2024
05 Sep, 2024
30 Jul, 2024
30 Jul, 2024
18 Jul, 2024
Desde la Coordinadora de Entidades Extranjeras de Cooperación Internacional (COEECI), que agrupa a 51 organizaciones privadas de cooperación internacional que laboran en el Perú, expresamos nuestra preocupación ante el alza de precios y la crisis alimentaria a nivel global que se cierne también sobre el Perú. Sus consecuencias podrían ser muy graves para la seguridad alimentaria y el bienestar de las familias peruanas, en especial para aquellas que viven en situación de pobreza en las ciudades y en el campo, dado que según fuentes recientes de la FAO afectaría a 15.5 millones de peruanos.
Si bien la pandemia y los acontecimientos alrededor del conflicto en Europa aparecen como los factores que precipitan esta crisis, preexistieron y persisten causas más estructurales relacionadas con los desafíos del modelo económico, la desigualdad, las reglas del comercio internacional y la política agroalimentaria vigente en el país.
La agricultura familiar sigue alimentando al país, aportando al menos el 57% de los alimentos que consumimos, según la más reciente investigación del Centro Peruano de Estudios Sociales (CEPES). Más de 2 millones de productoras y productores han mantenido su producción y oferta enfrentando con esfuerzo el complejo escenario generado por la pandemia de la covid19, y pese a no recibir una atención efectiva del Estado. En el 2021, el Gobierno anunció una Segunda Reforma Agraria (SRA) generando expectativas en el sector; sin embargo, estas aspiraciones no han sido satisfechas hasta la fecha y se ha debilitado el diálogo y los acuerdos asumidos meses atrás.
Apostar por la agricultura familiar es clave para enfrentar la nueva crisis alimentaria que se avecina y es una oportunidad para impulsar sistemas alimentarios más sostenibles, resilientes e inclusivos; máxime en contexto de cambio climático, al recordar los servicios ecosistémicos que brinda la agricultura familiar. Promoverla supone el debate sobre los modelos de agricultura que se requieren para disminuir la dependencia externa de insumos, aprovechando la enorme diversidad de recursos, experiencias y conocimientos que tiene el país y las familias agricultoras.
Hacemos un llamado hacia las autoridades competentes a retomar el diálogo responsable con todas las organizaciones y gremios formales y representativos del agro nacional que, con legítimas preocupaciones, desde sus experiencias y con capacidad de propuesta comprobada, contribuyen a encontrar alternativas de solución para enfrentar estas crisis. También, invocamos a los consumidores y ciudadanos a estar atentos y vigilantes a estos esfuerzos para reducir el impacto de una crisis alimentaria sin precedentes, cuidando además a quienes cumplen el rol fundamental de abastecer y asegurar nuestra alimentación.
Lima, 31 de mayo del 2022
Grupo Temático de la COEECI «Soberanía Alimentaria y Agricultura Familiar»
Consejo Directivo COEECI
—